tag:blogger.com,1999:blog-5954277939297435578.post144081079819374868..comments2024-01-03T07:06:10.963+01:00Comments on Sinapsis: Neurociencia, leyes y tribunales. El detector de mentiras.Antonio Orbehttp://www.blogger.com/profile/09241124169140096125noreply@blogger.comBlogger2125tag:blogger.com,1999:blog-5954277939297435578.post-27192267170910063342010-09-30T11:10:22.115+02:002010-09-30T11:10:22.115+02:00José C. gracias por el comentario que rebosa conoc...José C. gracias por el comentario que rebosa conocimiento jurídico y deshace malentendidos. Es obligado reconocer que mi post es una mezcla de argumentos dispares. El tuyo es mucho más preciso.<br />En primer lugar:la valoración del testimonio en un juicio. Simplemente, gracias por la aclaración. El hecho de que el testimonio sea complementario y no fundamental me lleva a pensar que los creadores del ámbito jurídico tenían claro la debilidad de la memoria y del testimonio.<br />Respecto de la contaminación del testigo y del juez, totalmente de acuerdo. Es parte del hilo argumental del post: nuestros prejuicios (en sentido amplio: educación, conocimientos, experiencias previas...) condicionan nuestros actos. El ser humano no es tan lógico como psicológico.<br />El libre albedrío es un asunto que necesita otro post para desarrollarlo debidamente. No digo que lo haya o no. Lo que digo es: si no existe, ¿quién es culpable o inocente?<br />En relación al detector de mentiras, está aún muy lejos, pero parece que si pudieramos asegurar a través de un escáner cerebral que el acusado nunca ha estado en el lugar del crimen, difícilmente podría ser culpable.<br />"¿Para qué los jueces entonces?" Y los médicos, economistas, inversores... Y los peones, conductores de coches de caballos, ensobradores... ¿Cambió el mundo con la imprenta? Creo que la sustitución de humanos por máquinas es imparable. Desde luego el oficio de juez es de los que menos riesgo corre, pero... No descarto que en un futuro próximo los médicos sean ayudados por máquinas en la toma de decisiones y cada vez tomen más decisiones y así en otras muchas áreas.Antonio Orbehttps://www.blogger.com/profile/09241124169140096125noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-5954277939297435578.post-27185925238970109582010-09-30T10:48:37.504+02:002010-09-30T10:48:37.504+02:00José C. envía este comentario por email.
El artíc...José C. envía este comentario por email.<br /><br />El artículo parte de una premisa que, en puridad, es mas que discutible desde un punto de vista judicial forense: que el testimonio es esencial a la hora de juzgar.<br /><br />Lo cierto es que -al menos en nuestro ámbito de derecho español, o incluso europeo- el testimonio de testigos o de las propias partes interesadas en el juicio es bastante accesorio, es decir complementario de otras pruebas más "científicas" (se ha acuñado incluso el concepto de policía científica) y nunca elemento fundamental del fallo o veredicto.<br /><br />Por otro lado, si bien es verdad que el recuerdo, la memoria, pueden estar "contaminados" por determinadas inferencias, no es menos cierto que también lo está la propia decisión judicial, que al resolver mediante una sentencia una determinado caso esta incorporando inconscientemente otras inferencias del propio juzgador (ideología, experiencias propias similares, prejuicios...etc)que también alejan ese juicio -humano por definición- de cualquier pretensión de constituirse en paradigma de una solución "judicialmente científica.<br /><br />No creo que pueda llegar a afirmarse nunca, por lo tanto, que el libre albedrío no existe. Tampoco podrá negarse todas las decisiones humanas -también las judiciales- deben lidiar con aspectos éticos, culturales y sociales no reemplazables por el inapelable cientifismo de supuestas maquinas detectoras de mentiras. ¿Para qué los jueces entonces?<br /><br />Los jueces que pueblan el mundo seguirán pues sintiendo en sus conciencias el peso que entraña admitir la posibilidad de haberse equivocado en alguna de sus decisiones.Antonio Orbehttps://www.blogger.com/profile/09241124169140096125noreply@blogger.com